HOTEL DOURO, Oporto

Mi estancia en el Hotel Douro comenzó un poco torpemente debido a mi llegada tardía, ya que no sabía cómo encender las luces de mi habitación. Además, el ruido proveniente de una sala de planta eléctrica fue perturbador. A pesar de eso, la ubicación es excelente, cerca del centro y con un ambiente bastante tranquilo. El desayuno fue sencillo, aunque quizás mejor sería probar una cafetería local. En general, aunque el hotel tiene sus años, ofrece una buena relación calidad-precio.

Mi estancia en el Hotel Douro fue una mezcla de experiencias. La habitación estaba limpia y era lo suficientemente espaciosa para mis necesidades, aunque el mobiliario se sentía un poco anticuado. El desayuno era básico y podría mejorarse, pero la ubicación cerca de la Casa da Música y otras atracciones facilitó mi exploración de Oporto.

Tuve una experiencia variada en el Hotel Douro. Por un lado, el personal fue bastante amable y servicial, lo cual me hizo sentir bienvenido. Por otro lado, el mobiliario y la decoración del hotel están un poco desgastados, lo que le resta un toque de modernidad. Aunque la ubicación es relativamente buena para acceder al transporte público, está algo alejada de las atracciones principales.

Mi estancia en el Hotel Douro fue bastante tranquila, aunque no exenta de inconvenientes. La ubicación es excelente, cerca de Casa da Música y con fácil acceso al centro de Oporto. La habitación era espaciosa, pero el ruido del cuarto de plantas eléctricas fue un problema. El desayuno, aunque no era extraordinario, era suficiente para comenzar el día.

Mi estancia en el Hotel Douro fue una mezcla de cosas buenas y algunas insatisfacciones. La cordialidad del personal fue notable y siempre estaba dispuesto a ayudar. Sin embargo, el ruido proveniente de una sala de plantas eléctricas me impidió disfrutar plenamente de mi descanso y, aunque la limpieza era aceptable, podría mejorar. La ubicación del hotel es excelente, permitiendo fácil acceso al centro de Oporto, lo cual fue una gran ventaja.